El sueño es un período muy importante para los bebés y, justamente por eso, hasta el tercer mes pasan más o menos 16 horas al día durmiendo o adormecidos. Sin embargo, durante la noche, para la mayoría de los padres y cuidadores, es un desafío conseguir que el bebé duerma tranquilamente.
Es importante recordar que los recién nacidos, generalmente, se despiertan cada tres horas para mamar, y este intervalo se va alterando de acuerdo con la edad del bebé. Es necesario estar, junto con su pediatra, siempre atento al desarrollo del niño, y también a la calidad de su sueño.
Mira estos cinco consejos para que, tanto el sueño del bebé, como los momentos que lo anteceden, sean más tranquilos:
1 - Báñalo antes de dormir: un baño tibio puede ayudar al bebé a relajarse y calmarse.
2 - Mantén el ambiente poco o nada iluminado: la oscuridad favorece el sueño del bebé. Las luces pueden irritarlo fácilmente.
3 - Utiliza pijamitas cómodos: el bebé necesita sentirse bien a gusto para dormir. Prendas con elásticos que aprietan y/o de cuello alto, no son indicadas.
4 - Regula la temperatura de la habitación: en días muy fríos, lo ideal es prender la calefacción. Si el clima está muy seco, prender un humidificador de aire también puede mejorar la respiración del niño.
5 - Juguetes: un osito o juguete favorito puede dar al niño más confianza a la hora de dormir.
¿Te gustaron los consejos? ¡Comparte con nosotros qué técnicas utilizas para asegurarte de que tu bebé duerma bien!
*Todas las informaciones contenidas en este post fueron basadas en informes periódicos, revistas y/o sitios de noticias.
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